3 ago 2011

El séptimo día


Nunca habría imaginado, cuando salió de casa ese domingo por la mañana, que conocería a su media naranja en el quiosco de periódicos. Ella tampoco, por lo menos si juzgamos por la mirada impasible con la que le contestó:

? Ahí abajo? mientras estiraba el brazo derecho e indicaba nerviosa una pila de periódicos:? No, ahí, ¡ahí he dicho!?.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Que opinas del tema?